Molló Parc es un Parque de animales situado entre bosques y prados en el entorno de un parque natural en pleno corazón del Valle de Camprodon (a 1’5h de Barcelona y en 1h de Girona).
A lo largo de un recorrido de 3 horas podréis pasear tranquilamente rodeados de árboles y animales. Estaréis en plena naturaleza y mientras iréis observando diferentes especies animales: osos, lince, lobos, águilas reales, marmotas, ginetas, ciervos, jabalíes, zorros … Todos ellos están en semi-libertad, en las mejores condiciones de bienestar y en su hábitat natural. Es importante tomar conciencia de que, una vez dentro del parque, se prioriza el bienestar de los animales a la voluntad de las personas, por eso probablemente podréis ver la mayoría de los animales, pero nunca podremos asegurar la visualización de todos ellos ya que se comportan según su voluntad.Por esta razón, podréis acceder al parque durante todo el día de la visita, siempre y cuando lo solicitéis antes de salir de este.
A medio recorrido encontraréis una zona de picnic, donde podréis desayunar, comer o merendar, o simplemente descansar un rato sintiendo el agua del río que pasa por el lado. Los más atrevidos, en pleno verano, incluso ponen los pies!
A la entrada / salida encontraréis otra zona de picnic desde donde podréis observar los osos y, de cara al buen tiempo, es donde encontraréis el hinchable de Molló Parc.
Una excursión indicada para mayores y pequeños,
porqué el amor por los animales no tiene edad, ¿no?
Los animales del parque no invernan, sólo las marmotas (de noviembre a marzo), por lo tanto podéis venir a cualquier época del año. Si venís en Primavera, podréis ver rebrotar la naturaleza y disfrutar del esplendor de verdes que nos ofrece esta estación del año. Si decidís venir en los largos días de verano disfrutaréis de la agradable temperatura del Valle de Camprodon, que en esta época es un auténtico placer. O bien, podéis venir y observar la variedad de colores que el otoño nos regala cada año. O venir a pasear tranquilamente y disfrutar de la quietud del invierno.
Descripción del vendedor
Molló Parc es un Parque de animales situado entre bosques y prados en el entorno de un parque natural en pleno corazón del Valle de Camprodon (a 1’5h de Barcelona y en 1h de Girona).
A lo largo de un recorrido de 3 horas podréis pasear tranquilamente rodeados de árboles y animales. Estaréis en plena naturaleza y mientras iréis observando diferentes especies animales: osos, lince, lobos, águilas reales, marmotas, ginetas, ciervos, jabalíes, zorros … Todos ellos están en semi-libertad, en las mejores condiciones de bienestar y en su hábitat natural. Es importante tomar conciencia de que, una vez dentro del parque, se prioriza el bienestar de los animales a la voluntad de las personas, por eso probablemente podréis ver la mayoría de los animales, pero nunca podremos asegurar la visualización de todos ellos ya que se comportan según su voluntad.Por esta razón, podréis acceder al parque durante todo el día de la visita, siempre y cuando lo solicitéis antes de salir de este.
A medio recorrido encontraréis una zona de picnic, donde podréis desayunar, comer o merendar, o simplemente descansar un rato sintiendo el agua del río que pasa por el lado. Los más atrevidos, en pleno verano, incluso ponen los pies!
A la entrada / salida encontraréis otra zona de picnic desde donde podréis observar los osos y, de cara al buen tiempo, es donde encontraréis el hinchable de Molló Parc.
Una excursión indicada para mayores y pequeños,
porqué el amor por los animales no tiene edad, ¿no?
Los animales del parque no invernan, sólo las marmotas (de noviembre a marzo), por lo tanto podéis venir a cualquier época del año. Si venís en Primavera, podréis ver rebrotar la naturaleza y disfrutar del esplendor de verdes que nos ofrece esta estación del año. Si decidís venir en los largos días de verano disfrutaréis de la agradable temperatura del Valle de Camprodon, que en esta época es un auténtico placer. O bien, podéis venir y observar la variedad de colores que el otoño nos regala cada año. O venir a pasear tranquilamente y disfrutar de la quietud del invierno.